jueves, 24 de febrero de 2011

Iniciamos la caida.


No recuerdo porqué me olvidé de ti, siéndote sincera creo que nunca lo supe, lo que si recuerdo es lo bien que lo pasábamos juntos. Esas tardes de sonrisas entre tus frases y locuras sin sentido de las que me reía siempre, era genial vernos tumbados en tu cama un día tras otro, siempre me pareció que no lo tenía por qué olvidar. Porque los finales tristes no le gustan a nadie.

No hay comentarios:

Publicar un comentario